Primera parte (click aquí)
Fuera de su campo de visión decidimos seguir buscando por el pueblo alguien que hubiera sobrevivido a la emboscada. Buscamos casa por casa, sin pasar por ninguna de las nuestras, por miedo a encontrarnos algún familiar muerto. Nos extrañó no encontrar cuerpos dentro de las casas, sólo estaban patas arriba, las que aún quedaba alguna pared en pie. Había muchísimo soldados haciendo la ronda, y nos era muy difícil pasar desapercibidos siendo un grupo tan grande, así que decidimos separarnos la mitad fuimos a la parte norte del pueblo y los otros en la parte sur, y quedamos en que una vez todo inspeccionado y con provisiones nos encontraríamos en la guarida de nuevo, que estaba en la zona este del pueblo, a mitad camino para los dos grupos.
Nosotros fuimos a la zona norte, donde, antes de todo esto estaba la biblioteca y la escuela y una zona de casas, donde vivíamos parte de nosotros. No llegamos a poder inspeccionar la biblioteca, ya que allí había una gran concentración de soldados, el edificio no estaba muy derruido, creo que allí debían tener sus refugios. En cambio, al pasar por la escuela me dio un salto el corazón, la semana anterior, a la hora que comenzó todo, no habría nadie. Suerte que el primer bombardeo fue en sábado, no el lunes o viernes, si no hubiera sido una masacre, muchos de nosotros hubiéramos muerto...
Íbamos casa por casa inspeccionando, y recogiendo latas de comida que posteriormente nos comeríamos, ahora no teníamos tiempo que perder, teníamos que volver antes de que se hiciera de noche. Al pasar por el lado de una casa, oímos unos ruidos en el interior. Con el corazón a mil nos escondimos como pudimos, pensando que eran unos soldados que nos habían descubierto. Silencio. Debieron ser imaginaciones nuestras...
Fuera de su campo de visión decidimos seguir buscando por el pueblo alguien que hubiera sobrevivido a la emboscada. Buscamos casa por casa, sin pasar por ninguna de las nuestras, por miedo a encontrarnos algún familiar muerto. Nos extrañó no encontrar cuerpos dentro de las casas, sólo estaban patas arriba, las que aún quedaba alguna pared en pie. Había muchísimo soldados haciendo la ronda, y nos era muy difícil pasar desapercibidos siendo un grupo tan grande, así que decidimos separarnos la mitad fuimos a la parte norte del pueblo y los otros en la parte sur, y quedamos en que una vez todo inspeccionado y con provisiones nos encontraríamos en la guarida de nuevo, que estaba en la zona este del pueblo, a mitad camino para los dos grupos.
Nosotros fuimos a la zona norte, donde, antes de todo esto estaba la biblioteca y la escuela y una zona de casas, donde vivíamos parte de nosotros. No llegamos a poder inspeccionar la biblioteca, ya que allí había una gran concentración de soldados, el edificio no estaba muy derruido, creo que allí debían tener sus refugios. En cambio, al pasar por la escuela me dio un salto el corazón, la semana anterior, a la hora que comenzó todo, no habría nadie. Suerte que el primer bombardeo fue en sábado, no el lunes o viernes, si no hubiera sido una masacre, muchos de nosotros hubiéramos muerto...
Íbamos casa por casa inspeccionando, y recogiendo latas de comida que posteriormente nos comeríamos, ahora no teníamos tiempo que perder, teníamos que volver antes de que se hiciera de noche. Al pasar por el lado de una casa, oímos unos ruidos en el interior. Con el corazón a mil nos escondimos como pudimos, pensando que eran unos soldados que nos habían descubierto. Silencio. Debieron ser imaginaciones nuestras...
Continuará....
(Con un solo comentario SOBRE EL RELATO, pongo la siguiente parte)
Atte: Oscuro Error
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